Ejemplos de estereotipos
¿Has tenido que explicarle a un tipo de Indiana que tienes WiFi? Bueno, es que los de ahí tienen fama de paletos y no es que quiera yo caer en estereotipos…o bueno, sí, que de eso os quería hablar. Hoy nos ponemos el sombrero de cowboy para repasar las ideas más delirantes que tienen sobre el resto del mundo, que es lo que queda más allá de su ombligo.
Tipos de estereotipos
Y por lo de tipos no me refiero a clasificación, sino a estos yankees que son personas que piensan que el mundo se divide entre ellos y el resto de gente que actúa de manera rara.
Unas estudiantes sorprendieron a sus compañeros de clase al contarles que España descubrió América. Porque ya se sabe, el mundo comienza cuando los colonos del Mayflower se desorientaron y acabaron mucho más al norte de donde querían ir.
También pareció sorprenderles que en España se hablara español, porque para ellos todo el mundo habla inglés. Je. Je, no saben los duros de oído que somo nosotros.
Pero claro, tampoco es de extrañar, para ellos la historia no se aprende en los libros, sino que se hace en las pelis de Hollywood.
La historia de Grecia, te la cuenta Brad Piit en Troya y el imperio romano se explica a la perfección con Gladiator.
Además, cómo no van a pensar que todo el planeta hablamos inglés si hasta en el coliseo romano hay inscripciones en este idioma ¿no lo sabías? Pues es que no has visto Gladiator II.
Yo cuando lo vi me quedé alucinado, ¿pero que les habría costado ponerlo en latín y subtitularlo? Bueno, se pensarían que poniéndolo con una fuente letra de estilo romano daría el pego, pero no.
O quizás sí…para los paletos de Indiana.
Estereotipos de género…tonto
Otras curiosidades que he escuchado que han experimentado algunos estudiantes de intercambio es que, por ejemplo, hace años a uno de mi colegio le pregunten que para qué quería una copia en video de su estancia allí, que ¿dónde la iba a ver?
A contraluz, ¡no te parece!
Otro me contó que su familia le envió un jamón para que no echara de menos su casa. Al volver del colegio se lo encontró tirado en la basura. Cuando preguntó por qué, le contestaron que es que se había estropeado por el camino, que si no veía la mala pinta que tenía.
¡Si estos supieran lo que hay debajo de esa corteza tan fea!
Como para explicarles lo rico que está el pulpo, con lo feo que es el animal. Yo a veces me pregunto el hambre que tuvo que tener el primero que se comió un pulpo, o una langosta…con lo feos que son esos bichos.
La naturaleza les proveyó con su sistema de defensa, siendo tan feos quién iba a pensar que estaban tan ricos.
Pero volvamos al tema. Cargados de estereotipos pues vale, pero casi siempre amables y deseosos de que te encuentres a gusto entre ellos.
Por eso, para que no tengas morriña de España, se hace una salida familiar a comer comida española. ¿A dónde te llevan? Pues al Taco Bell. ¿Acaso hay algo más español que eso?
Pues para ellos no, total ¿qué diferencia hay entre México y España? Ninguna. Salvo para los que han leído a Hemingway y saben que en un sitio la gente lleva sombreros grandes y en el otro todos vestimos de toreros o folclóricas.
¿Y de geografía cómo andan?
Pues no muy bien, todo lo que no esté dentro de sus fronteras ni se sabe por dónde cae.
Recuerdo una vez a un jugador de baloncesto norteamericano después de enfrentarse a España en un mundial, preguntó al reportero español que, por qué España, con el buen equipo que tenía, nunca se clasificaba para los campeonatos panamericanos.
Claro, porque para ellos España está por ahí, entre Nicaragua y Honduras.
Muchos más ejemplos tenemos. La hermana de una amiga estuvo de intercambio allí y la invitaron a la clase de español para que hablara con los chavales de allí.
Todo fue muy bien, pero al despedirse le dijeron que tuviera cuidado al volver, no derribaran su avión los rusos con alguno de los misiles que lanzan a Ucrania.
Esto no es que sean estereotipos culturales y sociales negativos, es que son un poco zotes.
Eso de la siesta es tradición ¿no?
Pues hombre, yo hace que no me echo una desde que era pequeño, porque lo que hacía en la universidad en las clases de las 4 de la tarde cuando llegaban los primeros calores de la primavera, no cuenta.
Todo lo contrario que algunos de mis compañeros. Uno casi se cae del asiento a lo que el profesor le dijo que por favor tuviera cuidado, que si quería dormir que lo hiciera, pero que lo que no quería era ser recordado como el profesor al que se le escalabro un alumno en su clase.
¿Y más ejemplos de estereotipos de otras nacionalidades?
Pues hay muchos, solo que esos me temo que son compartidos.
Por ejemplo, de los franceses piensan que todos llevan camisetas de rayas horizontales, boina, que son muy bohemios y se pasean con una baguete debajo del brazo.
De los rusos tienen la idea de que son bastantes aficionados al vodka y quizás sea un poco exagerado, pero no mucho, que por las mañanas no es raro ver a alguno con una lata de cerveza en lugar del vaso del Starbucks.
Aunque también para aficionados a la bebida, la fama de los irlandeses no se queda atrás. Si preguntaran por su estereotipo sería una camiseta verde, sombrero de copa y una pinta de Guiness.
Los italianos tienen fama de hablar como si estuvieran dirigiendo una orquesta. De hecho, dicen que la mejor manera de hacer callar a uno es atarle las manos.
De Australia, lo que conoce un norteamericano es que viven como dentro de un videojuego de supervivencia, todo lo que les rodea son bichos venenosos que quieren matarlos. Que te entre un apretón en el campo es un deporte de riesgo, mejor que te vean el culo a arriesgarte a ocultarte tras unos matorrales.
A los alemanes los ven como tipos serios que nacen con un manual de instrucciones y que el humor está prohibido por mandato constitucional. Bueno, aunque si hablamos de humor, el inglés, no es que destaque por su gracia.
Y es que los ingleses, como toman el té de las 5 con la reina, ahora con el orejones, entrenan su cara inexpresiva.
Algún ejemplo de estereotipo bueno habrá ¿no?
Pues claro, que esto es de doble sentido.
Antes hablábamos de los alemanes, que aparte de estrictos también son conocidos por su eficacia y buen hacer.
No tienes más que ver todas las marcas de coches o electrodomésticos teutonas que se anuncian como “ingeniería alemana” como señal de fiabilidad.
Los italianos, aparte de gesticular como si ni hubiera un mañana, son aclamados como grandes creativos. En este caso sus coches se venden como “diseño italiano”.
Así todo se vende mejor que un coche de ingeniería italiana y diseño alemán, que no tienen por qué ser malos, pero suena peor.
Y si hablamos de moda, todo lo que recuerde a francés o italiano vende mejor. ¿Te gustan los diseños de Francisco Rabaneda? Pues quizás no, pero si te digo que se cambió el nombre por Paco Rabanne, no me digas que no parece más sofisticado.
Igual que nuestro empresario por excelencia, Amancio Ortega, que para una de sus cadenas eligió Massimo Dutti. Siendo gallego podría haberse decantado por algo del terruño, algo más gallego como…Anxo Ribeiro ¿no crees?
Aunque quizás por aquél entonces ya existiera Anso, crema para las hemorroides y la comparación quedaría fea.
Mira, Anxo Hemorroides no queda mal para una marca de ropa. A los guiris les costaría pronunciarlo, pero ya se acostumbrarían, que es parecido a Carolina Herrera.
Y es que al final los humanos somos mucho de prejuicios y estereotipos, pero ¡qué se la va a hacer!
¿Conoces alguno más? Pues compártelo con todos nosotros.
