Carnaval de Rio, o de donde sea
Acabamos de dejar atrás el
carnaval, esa fiesta pagana en la que se puede comer y tocar carne antes de la
abstinencia de la Cuaresma. Muchos firmarían con que la abstinencia se limitara
al periodo de Cuaresma, pero eso es ya harina de otro costal.
Cariño, para lo de la abstinencia espera a la Cuaresma
El caso es que las calles se
llenan de alegría, disfraces, fiesta y adolescentes de botellón, pero estos
últimos, por habituales, ya ni captan nuestra atención.
Hoy vamos a hacer un
repaso de los distintos disfraces que se pueden ver por las calles. Porque
elegir un disfraz para los que vivimos en el interior de la península, tiene
sus limitaciones.
Puede que te apetezca disfrazarte de hawaiana o de caníbal,
pero a menos que te lo pintes sobre el forro polar, es mejor que te olvides de
ello y te busques disfraces más recogiditos como los de pingüino u oso polar, porque aún con el calentamiento terráqueo, impera el fresquito.
Ese disfraz...para el carnaval de Cádiz, que es más calentito
Antes, cuando los chicos nos
hacíamos hombres cumpliendo con la patria, y os puedo asegurar que eso es
cierto, un clásico entre los disfraces era el de recluta.
Pero me da a mí la
sensación que triunfaba más entre las mujeres y los objetores, que le birlaban
el uniforme a su hermano mayor, ese al que lo único que le ha tocado en un
sorteo fue marcharse a Melilla. Desde luego, después de 9 o más meses vestido
de aquella guisa, te quedaba de todo menos ganas de ponerte el uniforme de cada día para salir de
cachondeo.
¿Disfraz de soldado?...eso es de objetor
Otro clásico es el de
vampiro/vampiresa. Ese es el favorito de gente como las hijas de ZP, que no
tienen necesidad ni de planificar, basta con abrir el armario y coger lo
primero que encuentren. Todo es negro, así que combina a la perfección.
Aunque
claro, como esto del carnaval supone disfrazarse del algo que no tiene nada que
ver contigo, lo mismo a las chiquillas lo que les gusta es disfrazarse de Sisí
emperatriz, con sus vestiditos de princesa y su tiara de “diamantes”.
Y ya que
hablamos de presidentes, el que está de moda estos carnavales no es otro que el
de Trump, una gorra roja con mensaje patriótico y un pelucón rubio platino. Más
fácil imposible.
Paco, no te disfraces de Trump,...que yo no entro en el de Melania
Este año he visto un disfraz muy
currado. Este es uno del carnaval de Brasil, y lo digo por lo que comentaba
antes del frio. Es el disfraz de aguacate, y como os comentaba, no está al
alcance de cualquiera.
¿En qué consiste el disfraz de aguacate?, os lo describo
a continuación. Se trata de coger una
cartulina de color verde, verde aguacate preferiblemente. Se corta con forma de
aguacate partido, que para los que no conozcan esta fruta exótica, tiene la
misma forma que la de una pera de las de toda la vida.
Se pinta el borde
exterior de un verde más oscuro y se practica un orificio en la parte estrecha,
para sacar la cara. Pues eso es bien fácil, os diréis, pero ahora viene la dificultad.
Se practica otro orificio más
grande en la parte ancha y por ahí...¡se
saca la barriga cervecera!, que es donde estriba toda la dificultad, porque una
buena barriga, tarda años en conseguirse.
También valdría una de embarazada,
pero también lleva su tiempo, y en este caso también sus consecuencias. Y
conociendo a los brasileños, es más probable que te hagan el bombo en carnaval
a que vayas con él ya puesto.
Me lleva muchos años y cervezas preparar mi disfraz de este carnaval
Aunque no lo he visto, y casi que
me alegro, es el disfraz de doble aguacate. Consistiría en lo mismo por delante
y por detrás. Me temo que este disfraz sería menos realista, porque ¿quién ha
visto un aguacate con el hueso partido?
Lo más divertido de los disfraces
es hacerlo en grupo. Este año yo he visto una cuadrilla disfrazados de “Star
wars”. Aunque me temo que estos son unos
“frikies” de esos que se disfrazan en cualquier ocasión y aprovechan el
carnaval para pasar desapercibidos.
Otro grupo que he visto este año ha sido el
de vacas lecheras, aunque ese disfraz parece más típico de las despedidas de
soltero. Quizás es que todos ellos ya lo tenían de las suyas y reciclaron
modelito, que no está la vida para derrochar.
Hace años unos conocidos se
disfrazaron de futbolín. Se pusieron ropa de deporte y se pegaron un palo de
escoba por los costados, todos juntos haciendo una hilera.
Como el disfraz era
muy poco manejable para ir de bares, acabaron con la estructura desmotada y
simplemente en chándal, con lo que parecían disfrazados de traficante, que son de
los que salen de marcha con ropa cómoda por si hay que echar a correr.
Estamos en crisis, reciclo el disfraz de la despedida de soltero
Aunque sin duda el disfraz de
grupo que más me ha divertido este año ha sido el que me ha “descubierto” un
amigo con el que salí el sábado.
-¿Has visto que disfraz más
logrado lleva ese grupo?
-¿A cuál te refieres?
-Esas chicas de allí - me
responde señalando con la cabeza.
-Ah, ¿esas que van de fulanas?,
¿con minifaldas cinturón, escotazos, tacones y
pintadas como cuadros de Miró?
-Si, esas.
-Pues me temo que esas no van disfrazadas.
Son adolescentes de fin de semana.
Y es que mi amigo, como padre primerizo, hace tiempo que no sale por la noche.
Ah, ¿pero eso no es disfraz de fulana?
Y tú, ¿cuál ha sido el mejor
disfraz que has visto estos carnavales?
P.D.: por si no os ha quedado
claro, os dejo la foto del disfraz de aguacate. Pero si lo que queréis es un auténtico disfraz u otro artículo de aguacates, no dejéis de visitar la web de deaguacates.es